Este 2023 apenas comienza y la mejor manera de arrancar el año es con una dosis de acción retro. Este año arranca con Vengeful Guardian: Moonrider, el nuevo juego de la desarrolladora JoyMasher de Brasil, desarrolladora que se enfoca en crear juegos retros, pero con sensibilidades y toques modernos. Su juego anterior fue el excelente Blazing Chrome, un juego inspirado por clásicos como Contra, Doom Troopers y Metal Slug. Ahora en este 2023 tenemos otro juego retro, pero ¿qué tipo de juego nos entregan esta vez los brasileños? ¿Qué les parece una mezcla de Megaman X y Shinobi 3? ¿Mezcla interesante? Veamos.
Historia
Con respecto a historia y narrativa, Vengeful Guardian: Moonrider opta por la mínima exposición y se podría decir que siquiera es un aspecto tan relevante del juego. La historia es bien básica, un mundo dominado por un grupo ha creado supersoldados (cyborgs) de guerra para mantener el control y la opresión sobre la población y las naciones del mundo, pero uno de estos cyborgs se despierta de hibernación y desafía el destino para el cual fue creado y en su lugar se vuelve el justiciero de la humanidad, desafiando a sus creadores y destruyendo todo lo que se oponga a su nuevo ideal. Esta historia se ve en un par de cutscenes dentro del juego y solo sirven para dar contexto del porqué nuestro personaje hace lo que hace, o mejor dicho “hacemos”.
Gameplay
En cuanto a jugabilidad estamos ante un auténtico clásico moderno inspirado en obra de los 16 bits como Shinobi 3, Hagane y Megaman X. Nuestro héroe es un ninja cyborg que se controla muy similar a la obra de Sega antes mencionada. Este puede hacer dash, wall jumps, engancharse a ciertas superficies, golpes agachados, en fin, todo lo típico para un juego de este tipo.
Las inspiraciones de Megaman X vienen en su estructura y forma de juego. A diferencia de un juego lineal, con niveles predefinidos que no podemos cambiar, acá se utiliza un hub similar a los de los juegos de Megaman, en el que elegimos la zona en el orden en que queramos. También, y al igual que en Megaman, cada vez que vencemos a un boss de nivel obtenemos su poder, el cual podemos equipar para ser utilizado.
Además de los poderes de nuestros enemigos vencidos, podemos obtener en cada nivel, chips ocultos que podemos equipar antes de iniciar un nivel. Estos chips nos brindan algunas habilidades pasivas y activas como por ejemplo, doble salto, regeneración de HP, etc…
El juego tiene una gran dificultad y está claramente diseñado pensando en la rejugabilidad de sus niveles, tanto para poder aprenderlos a la perfección, para poder superarlos como para mejorar nuestro rango. ¿Rango? ¿En un juego de este tipo? Así es, el juego tiene un ranking system que dependiendo el tiempo que tomemos en el nivel, las veces que morimos y el score obtenido podemos obtener letras que van desde la E (peor Rank) hasta la S (mejor Rank).
Cada nivel del juego pondrá a prueba nuestras habilidades e incentivan a practicar y perfeccionar cada escenario que el juego nos ofrece.
Apartado Gráfico y artístico
En su apartado gráfico y artístico tenemos un juego que no esconde sus raíces. Si imagináramos un juego lanzado en la era de Shinobi o Hagane, en ese mismo estilo de juego, pues ya sabemos cómo se ve este juego. Hermoso arte de 16 bits, pero con un toque de modernidad, gracias a animaciones más detalladas y variadas en los personajes y la claridad del HD, en el que todos los detalles del juego se ven a la perfección.
Su apartado artístico está claramente inspirado en estas dos obras mencionadas anteriormente, pero se inclina más hacia Hagane en este apartado, incluso, este juego toma tanta inspiración artística de Hagane que se siente como una secuela espiritual de este, lo cual no es para nada malo. Ambientación, paleta de colores, forma de juego, enemigos, niveles, todo está inspirado en ese titular clásico de culto del SNES. 
Música
A nivel musical estamos ante un trabajo excepcional. El compositor Dominic Ninmark, nos brinda un Soundtrack muy energético y apropiado para el juego. La música es bien movida y frenética en todo momento, incentivando al jugador a mantenerse activo y en constante movimiento durante toda la duración del juego.
Vale la pena recalcar los toques orientales en las canciones, lo que le da matices japoneses a las piezas, haciendo alusión al tipo de juego que es, que nuestro personaje es un cyborg ninja y diríamos que en honor a esas obras del pasado en la que está inspirada este juego y una mención honorable a Ninja Warriors, otro gran juego del género, con una temática similar a Moonrider y con un soundtrack similar a este.
Un soundtrack excepcional que no tiene nada que envidiar a lo de esos clásicos de la era 16 bits. También recomendamos una escuchada al soundtrack de Blazing Chrome, otra obra excepcional de un compositor excepcional como lo es el Sr. Dominic Ninmark.
Conclusión
Si bien es cierto que el año 2023 viene bien cargado de grandes títulos en el horizonte, Vengeful Guardian: Moonrider nos da un respiro de aire fresco para comenzar este nuevo año.
Con su estilo retro 16 bits, su dificultad, su buena música y el amor y pasión que se siente en la elaboración de este proyecto, este juego es un respiro de aire fresco para todo amante de los videojuegos, un juego que apela a esa nostalgia que tenemos por los clásicos y que nos recuerda porque amamos el gaming.
Vengeful Guardian: Moonrider está disponible para PlayStation 5, PlayStation 4, Nintendo Switch & PC. Este Review fue realizado por Angel Báez en Playstation 5 y la copia del juego fue gracias a The Arcade Crew.
Todas y cada uno de los Reviews bajo el sello de GameOverLA contiene una opinión independiente, no estamos afiliados a ninguna compañía de videojuegos, lo que nos permite brindar opiniones y cobertura de noticias menos convencionales y sin propaganda.
