El 2023 ha visto una preocupante cantidad de desarrolladores y editores de la industria de los videojuegos siendo afectados por despidos, y parece que Bungie ahora se ha unido a esa lista en constante crecimiento. Según un informe publicado por Jason Schreier de Bloomberg, se ha afirmado que la compañía – que fue adquirida por Sony el año pasado en una operación valorada en $3.6 mil millones – ha despedido a un número no especificado de sus empleados.
En el mismo informe, también se afirma que los dos proyectos en los que Bungie está oficialmente confirmado que está trabajando actualmente han sido ambos retrasados. Destiny 2: The Final Shape, que anteriormente tenía previsto su lanzamiento para febrero, aparentemente ha sido retrasado hasta junio de 2024, mientras que el juego de disparos PvPvE llamado Marathon, anunciado a principios de este año, parece haber sido pospuesto hasta 2025.
Ni Sony ni Bungie han realizado declaraciones oficiales sobre los despidos o los retrasos. Informes anteriores también han afirmado que Bungie está trabajando en un título similar a un MOBA llamado Matter, que supuestamente apunta a un lanzamiento en 2025, aunque aún se desconoce cómo (o si) este proyecto ha sido afectado por estos acontecimientos recientes.
Bungie está lejos de ser la única empresa que ha sufrido despidos en los últimos meses, con compañías como Naughty Dog y Media Molecule de PlayStation, Epic Games, Telltale Games, Creative Assembly, Team17 y Crystal Dynamics, entre otras.
